La vida es una puta vestida de colores, a veces blanca en ciertas etapas de nuestras vidas, a veces negra y hasta trágica. Hoy 22 de Septiembre de 2009 a las 05.00 pm falleció de cáncer mi Primo Hermano” Fuji” como cariñosamente le llamábamos, a sus 20 años de edad.
Su vida fue también una puta vestida de colores, pero más negra que blanca o color rosa, pues se le detecto cáncer a sus siete años de edad, cuando aún era un niño, su madre y para todo aquel que lo rodeaba fue una trágica noticia, para él, quizás simplemente a su corta edad una simple “enfermedad”. Para los que poseen o tienen un familiar u amigo conocen que esta maldita enfermedad es penosa, con una y tras otra quimioterapia que te ofrece esperanza de vida, consumiéndote día a día, pero está muy difícilmente cede.
Recuerdo que hace 08 años fue trasladado a la ciudad de Lima para una de más de sus quimioterapias, pero su cuerpo delgado, cansado, consumido por la enfermedad ya no resistirímás, para lo cual los médicos lo desahuciaron, de inmediato fue trasladado en avión a la ciudad de Piura, pues ya agonizaba y solo se esperaba su deceso que era cuestión de horas, pero estuvo postrado en cama tres días mucho más de lo que habían diagnosticado, ya era más que un milagro, y entonces sucedió algo más que un milagro, pues al tercer día, se levanto de la cama como si ninguna enfermedad lo aquejara, donde su madre y sus hermanos conmocionados, asustados lo miraban y entonces dijo “ que me ven…..quiero comer” . Fue sorprendente la forma como se recupero cuando se esperaba su final.
Ese fue mi primo, un hombre que luchaba con la muerte día a día, sus deseos de querer vivir se acrecentaron, y quizás fue feliz en cortos momentos de su vida con la sonrisa de su madre, él era consciente de su enfermedad, aunque siempre se le oculto que ya estaba desahuciadoel siempre lo supo, pero era fuerte ante su madre, fue un héroe, una y otra vez se enfrento con ese enemigo llamado cáncer, y cuando ya parecía estar vencido, porque un médico decía que ya no hay nada más que hacer, él ni entererado se levantaba, aun cuando en más de una ocacion le diagnosticaron solo días de vida.
Hace unos cinco meses, decayó gravemente, se requerían varias unidades de sangre para una transfusión, pues su hemoglobina estaba en decadencia. Por mi parte sentí un estado de culpa pues se podía morir en cualquier momento, y tuve miedo, miedo de no haber hecho nada por él; sé que donar sangre no es cosa del otro mundo, pero donarla yo, solo de pensarlo es un infierno, pues temo enormemente a las agujas, me dan pavor; ya anteriormente hacia 8 o 9 años había vencido ese miedo para cuando mi madre requería sangre para una operación delicada, y pensé que nunca más iba a hacerlo, pero mi conciencia me ordeno que lo hiciera nuevamente, con todo y mis temores done, hubiera querido comprarla, pero el hecho es que la sangre la necesitaban urgente, y no había vendedor disponible, suena un poco escalofriante, pero entenderán que siento temor.
Mi primo después de aquello, como siempre mejoro de salud, hasta hoy, que ya no pudo mas, y decidió abandonar la lucha, aunque es difícil de creer que la abandono, sino que simplemente esta maldita enfermedad finalmente te gano.
Esa fue tu vida, una puta vestida de colores, eres el primer JARA de la segunda generación que te vas, sin dejar una semilla, pero ten la seguridad, que ya te seguiremos después, eso sí, uno por uno. Primo Elvis Jara García, descansa en paz en el mas allá y esto lo escribi en memoria del primo que siempre me gano en Ajedrez.
Su vida fue también una puta vestida de colores, pero más negra que blanca o color rosa, pues se le detecto cáncer a sus siete años de edad, cuando aún era un niño, su madre y para todo aquel que lo rodeaba fue una trágica noticia, para él, quizás simplemente a su corta edad una simple “enfermedad”. Para los que poseen o tienen un familiar u amigo conocen que esta maldita enfermedad es penosa, con una y tras otra quimioterapia que te ofrece esperanza de vida, consumiéndote día a día, pero está muy difícilmente cede.
Recuerdo que hace 08 años fue trasladado a la ciudad de Lima para una de más de sus quimioterapias, pero su cuerpo delgado, cansado, consumido por la enfermedad ya no resistirímás, para lo cual los médicos lo desahuciaron, de inmediato fue trasladado en avión a la ciudad de Piura, pues ya agonizaba y solo se esperaba su deceso que era cuestión de horas, pero estuvo postrado en cama tres días mucho más de lo que habían diagnosticado, ya era más que un milagro, y entonces sucedió algo más que un milagro, pues al tercer día, se levanto de la cama como si ninguna enfermedad lo aquejara, donde su madre y sus hermanos conmocionados, asustados lo miraban y entonces dijo “ que me ven…..quiero comer” . Fue sorprendente la forma como se recupero cuando se esperaba su final.
Ese fue mi primo, un hombre que luchaba con la muerte día a día, sus deseos de querer vivir se acrecentaron, y quizás fue feliz en cortos momentos de su vida con la sonrisa de su madre, él era consciente de su enfermedad, aunque siempre se le oculto que ya estaba desahuciadoel siempre lo supo, pero era fuerte ante su madre, fue un héroe, una y otra vez se enfrento con ese enemigo llamado cáncer, y cuando ya parecía estar vencido, porque un médico decía que ya no hay nada más que hacer, él ni entererado se levantaba, aun cuando en más de una ocacion le diagnosticaron solo días de vida.
Hace unos cinco meses, decayó gravemente, se requerían varias unidades de sangre para una transfusión, pues su hemoglobina estaba en decadencia. Por mi parte sentí un estado de culpa pues se podía morir en cualquier momento, y tuve miedo, miedo de no haber hecho nada por él; sé que donar sangre no es cosa del otro mundo, pero donarla yo, solo de pensarlo es un infierno, pues temo enormemente a las agujas, me dan pavor; ya anteriormente hacia 8 o 9 años había vencido ese miedo para cuando mi madre requería sangre para una operación delicada, y pensé que nunca más iba a hacerlo, pero mi conciencia me ordeno que lo hiciera nuevamente, con todo y mis temores done, hubiera querido comprarla, pero el hecho es que la sangre la necesitaban urgente, y no había vendedor disponible, suena un poco escalofriante, pero entenderán que siento temor.
Mi primo después de aquello, como siempre mejoro de salud, hasta hoy, que ya no pudo mas, y decidió abandonar la lucha, aunque es difícil de creer que la abandono, sino que simplemente esta maldita enfermedad finalmente te gano.
Esa fue tu vida, una puta vestida de colores, eres el primer JARA de la segunda generación que te vas, sin dejar una semilla, pero ten la seguridad, que ya te seguiremos después, eso sí, uno por uno. Primo Elvis Jara García, descansa en paz en el mas allá y esto lo escribi en memoria del primo que siempre me gano en Ajedrez.
